Recientemente ante el anuncio de Bloomberg sobre su nueva lista de billonarios, se ha venido a nosotros una lucha incesante por la hegemonía de la información financiera. El puesto que antes Forbes ostentaba como la compañía monopólica de los rankings sobre economía se ha visto tambaleado por una eficiente e innovadora forma de mostrar a los hombres más ricos del mundo día a día, así como la variación en su fortuna. Hace poco mencionábamos que en la lista de Forbes, el fundador de Bloomberg, Michael Bloomberg había sido incluido en el puesto número 20 de los más ricos del mundo. Sin embargo para su sitio, el multimillonario no será contabilizado.
Hablemos entonces un poco de la metodología usada por Bloomberg:
El cálculo del índice de los más millonarios se basa principalmente en el cambio de los mercados, por lo que la actualización se da diariamente a las 5:30 pm hora de Nueva York. Además, la riqueza se valúa en dólares al tipo de cambio del cierre. Esta parte es importantísima, pues a pesar de que gran parte de los que conforman esta lista tiene sus fortunas en dólares, en el caso de existir un evento donde una moneda tenga grandes diferencias ya sea de apreciación o depreciación y alguno de los participantes tenga su riqueza en esa moneda podría dar un salto en el ranking.
Los activos de las empresas privadas sólo son tomados en cuenta si son verificados oficialmente. Las pérdidas y ganancias son medidas mediante comparación en pares similares de empresas públicas, además que si las empresas tienen activos que son difíciles de vender se les hace un descuento de 5% de liquidez. Y en el caso de que los activos de una persona estén concentrados en un solo lugar, se le aplica un descuento de riesgo país a estos según la facilidad de convertirlos en líquido en esa zona geográfica. Para este cálculo de riesgo participa la calificadora Standar & Poor´s.
Otro elemento importante son los dividendos que también se incluyen en la estimación, así como las ventas y compras de acciones ya sea de empresas públicas o privadas. Respecto a los impuestos calculados se hace en base a las ganancias, capital e ingreso según las tasas de gravamen a estos y según el país de residencia de cada persona, cabe destacar la coordinación y el gran campo que abarca este cálculo pues el capital de las personas podría moverse con facilidad y lleva a ser un verdadero reto para tomar en cuenta la base gravable sobre éste. Además que el efectivo se calcula a través de un retorno híbrido donde se incluye el efectivo retenido e inversión en títulos de deuda públicos, acciones y commodities.
En cuanto a los familiares, el cálculo tiene como premisa que toda fortuna de un individuo es inherente a la fortuna familiar por lo que los intercambios familiares no valen para disminuir o incrementar la riqueza.
Los cálculos de Bloomberg además tienen calificación respecto a la precisión de la estimación. Esto porque la información de las fortunas de diversos personajes pondría a un fácil alcance de los investigadores (donde la publicación de la información es provista incluso por la misma empresa). Sin embargo, otra parte de estas podría encontrarse con dificultades para estimar debido a la inversión en activos privados y por lo tanto las estimaciones se basan más en flujo de efectivo que en activos, esta calificación va entonces de las cinco estrellas para la más confiable donde la información en parte es provista por los mismos personajes o sus representantes, hasta una estrella donde la información es limitada.
Los cálculos de la riqueza en un informe más completo así como la metodología utilizada para cada uno de forma personalizada, está disponible si tienes una cuenta de suscriptor Profesional. Esta nueva apuesta de Bloomberg le ha generado por ahora un salto importante en la competencia por ganar lectores, llevando a cabo su cálculo además con una calidad y esfuerzo impresionantes. Mientras que Forbes, hasta incluyó a su fundador en su lista de los más ricos y más poderosos del planeta, sin duda la pelea por el primer puesto acaba de comenzar y podremos ver en un corto plazo las mejoras obligadas en las publicaciones de Forbes, y por lo tanto los más beneficiados seremos los lectores, porque como bien dice la teoría económica: La competencia incentiva la innovación, mientras que el monopolio la desincentiva.
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