Al cierre de la jornada, el Dow Jones ganaba un 0.44% para terminar en los 13,252.76 pts en tanto el Nasdaq aumentaba un 0.51% hasta los 3,056.37 pts. Pero los titulares se los llevó el S&P’s 500, el que mejor refleja el tono general de Wall Street: fue el que más subió (+0.6%) y rebasó los 1,400 pts para concluir en los 1,402.60 pts.
Los datos, en general, robustecieron la percepción de que la economía de EU está ganando fuelle. Las solicitudes de subsidios de desempleo para la semana terminada el 10 de marzo se redujo de 365,000 en la semana previa (revisado al alza de 362,000) a 351,000, lo que iguala su mejor cifra en cuatro años y superó las estimaciones del consenso de 355,000. Además, inesperadamente el índice manufacturero del Empire State de la Fed de Nueva York repuntó a 20.2 en marzo comparado con 19.5 en febrero, sorprendiendo al consenso (+15.0). Y el de la Fed de Filadelfia mejoró a 12.5 en marzo frente a 10.2 en febrero, en línea con las estimaciones.
Por otro lado, las presiones inflacionarias parecen contenidas. En los precios al productor, el índice general subió un 0.4% presionado por los precios del petróleo, por debajo del 0.5% del consenso. Por otro lado, la subyacente, excluyendo petróleo y alimentos, subió un 0.2%, en línea con lo estimado.
Así que hay recuperación económica en marcha y, en tanto las presiones inflacionarias se mantengan reprimidas, la Fed no se verá en la urgencia de tener que empezar a retirar el exceso de liquidez (aunque las últimas noticias han sido suficientes para hacerlo retroceder en sus planes de un nuevo programa de compra de activos).
De nuevo las financieras treparon con fuerza: fue el sector que más subió en el S&P’s 500 (+1.6%), aún impulsado por los resultados del test de resistencia y la carrera en la que entraron los bancos para elevar sus dividendos y comprometerse a planes de recompra de acciones. El primero en esa competencia fue JP Morgan, que incrementó el dividendo a 30 centavos, pero pronto le siguieron otros como Wells Fargo, American Express o US Bancorp.
Más allá del debate de si los grandes bancos deben aumentar su dividendo, lo que enflaquecerá sus colchones de capital para hacer frente a un repentino shock en caso de producirse, lo cierto es que ha servido de carnaza para atraer a los inversionistas. Incluso Citigroup, el reprobado más sonado, trepó hoy un 3.0% luego de desplomarse ayer un 3.4%. También treparon con virulencia Morgan Stanely (4.9%), Bank of America (4.3%), JP Morgan (2.5%), Goldman Sachs (2.2%), Wells Fargo (2.1%) y American Express (1.0%).
Los buenos datos de la manufactura también sirvieron de aliciente al sector industrial, el segundo de mejor desempeño hoy en Wall Street (+1.2%). General Electric, el mayor conglomerado industrial del mundo, subió un 1.9%, en tanto su gran competidora, Honeywell, avanzó un 0.6%. Jonhson Controls ganó un 2.8% y Caterpillar un 1.1%.
En medio de eso, el sector tecnológico, el que más ha subido este año, tuvo un comportamiento más comedido (+0.4%). De hecho, la peor acción del Dow Jones en la jornada de hoy fue Cisco Systems (-1.4%), el mayor fabricante de routers e interruptores para dirigir el tráfico de internet tras conocerse que comprará a NDS por 5,000 millones de dólares (mdd) para competir contra Apple TV. NDS es una compañía británica que hace software a 90 compañías cableras y de televisión satelital.
Apple, que hoy tocó por primera vez los 600 dólares acción, cerró la jornada en $585.56 dólares, o un descenso de 0.7%. La que sí subió a un nuevo récord fue IBM, que en su séptimo día consecutivo de subida, ganó un 0.6% hasta los 206 dólares.
Mañana la fiesta puede continuar y podemos ver cerrar la semana a Wall Street en nuevos máximos del año. Los propulsores serán de nuevo los indicadores económicos, sobre todo el dato de producción industrial. El consenso de Bloomberg estima que en febrero, la actividad industrial aumentará un 0.4% tras una lectura de 0.0% en enero. Pero nos tememos que habrá otra sorpresa: nuestro pronóstico, el de Dinero Llama Dinero, es que la producción industrial se incremente un 0.7%. Para ver nuestra estimación, lea nuestra previa.
Otro indicador referente a la actividad real será la lectura preliminar de la confianza del consumidor de la Universidad de Michigan: el consenso de Briefing.com estima una cifra de 75.8 comparado con 75.3. Las buenas cifras de empleo pueden mejorar el humor de los consumidores, si bien ese mejor ánimo se verá en parte contrarrestado por el reciente aumento de las gasolinas.
Por el lado de los precios, esperemos que no haya grandes preocupaciones. Se publica el índice de precios al consumidor, y la inflación general, presionada por los precios de la energía, puede incrementarse un 0.4% en febrero, el doble de los observado en enero. La subyacente, sin embargo, se estima en 0.2%, la misma tasa registrada en el mes previo.
Por tanto, en el frente macroeconómico, pueden seguir llegando buenas noticias, sobre todo en lo referente a la actividad industrial. Y si es así, ¿por qué no subir mañana un poco más?.
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