Tras el rally de ayer, que llevó a Wall Street a nuevos máximos del año, y que puso al Dow Jones y al Nasdaq por encima de los 13,000 y los 3,000 pts respectivamente, hoy los mercados se tomaron un respiro. La jornada sirvió para digerir toda la información de ayer: un crecimiento mayor de lo esperado de las ventas minoristas, una mejora en las expectativas económicas de la Fed (tanto por un mayor dinamismo de la economía de EU como por un relajamiento de las tensiones en los mercados internacionales) y al cierre, los resultados del test de resistencia. Y todo eso, lo que produjo en Wall Street hoy fue una jornada de apenas cambios, de consolidación, con una modesta subida del Dow Jones y ligeros descensos en el Nasdaq y S&P’s 500.
De este modo, el S&P’s 500 rompió, aunque por poco, una racha de cinco días consecutivos de subidas luego de que ayer cerrara en su nivel más alto desde junio de 2008. El hecho de que el mercado se resistiera a tomar beneficios nos hace pensar que Wall Street puede saltar aún más alto. Una buena oportunidad para que esto suceda sería el viernes, cuando creemos que el dato de actividad industrial de EU vendrá por encima de lo que pronostica el consenso.
Al cierre de la jornada, el Dow Jones ganaba un 0.12% para terminar en los 13,193.10 pts mientras que el S&P’s 500 descendía un 0.12% para concluir en los 1,394.28 pts. El Nasdaq terminaba prácticamente en tablas, al repuntar sólo un 0.03% a los 3,040.73 pts.
El sector financiero, en particular, tuvo un comportamiento muy dispar: el test de resistencia, en general, fue favorable. Según los resultados de la Fed, de los 19 bancos inspeccionados, 15 poseían capital suficiente para hacer frente a un escenario adverso. Pero cuatro suspendieron, entre ellos Citigroup y MetLife, quienes fueron vilipendiados: Citigroup se desplomó un 3.4% (si bien ayer trepó un 6.5%), y MetLife se hundió un 5.8%. En el extremo opuesto, Bank of America, que pasó el test, trepó un 4.1%. JP Morgan, que ayer elevó su dividendo y su acción se disparó un 7.0% subió hoy un 0.4% adicional. Las pérdidas de unos compensaron los descensos de los otros y el sector financiero apenas tropezó un 0.1%.
También hoy, dentro del sector financiero, estuvo en la mira Goldman Sachs, luego de que un alto ejecutivo saliera de la compañía echando pestes de la empresa ante la pérdida de valores de sus directores, que atienen más al beneficio de la empresa que al de los clientes (e incluso a costa de ellos, como fue en el nefasto caso de Abacus). Goldman Sachs perdió un 3.4%.
El único sector que salió hoy adelante fue, cómo no, el tecnológico, que este año saca varias cabezas de ventaja al resto. Subió un 0.6%, y Apple prosigue su imparable marcha ascendente de modo que ya husmea los 600 dólares por acción. Hoy subió un 3.8% a los 589.58 dólares. Morgan Stanley elevó su precio objetivo a los 720 dólares.
Los indicadores económicos publicados hoy, los precios a la importación para febrero junto con la balanza de pagos para el cuarto trimestre, pasaron prácticamente desapercibidos y no movieron al mercado. Además se publicaron los reportes trimestrales de solicitudes de hipotecas y de inventarios de energía.
Mañana contaremos con datos de mayor interés: se publicarán las solicitudes de subsidios de desempleo para la semana terminada el 10 de marzo, así como dos reportes sobre la manufactura para el mes de marzo: el índice del Empire State de la Fed de Nueva York y el de la Fed de Filadelfia. Esto por el lado de la actividad real. Por el lado de los precios tendremos los precios al productor de febrero.
Sin embargo, creemos que lo que puede dar un nuevo impulso a Wall Street es el dato de la actividad industrial para febrero que se publicará el viernes, y que podría sorprender con otra cifra superior a la que espera el consenso.
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