Wall Street abrió con pérdidas, pero pronto se recuperó y
durante la mayor parte de la jornada cotizó en tono mixto, con el Nasdaq con
ligeras ganancias alentada por los buenos reportes trimestrales de algunas
tecnológicas, y el S&P’s 500 y el Dow Jones con moderadas caídas.
Al cierre de la sesión, el Nasdaq lograba incrementarse un
0.31% para terminar en los 3,059.85 pts. El Dow Jones, que ayer cerró en un
nuevo máximo de 4 años, logró mantenerse cerca de esos niveles, al ceder sólo
un 0.08% para terminar en los 13,268.65 pts. Finalmente, el S&P’s 500
bajaba un 0.25% para concluir en los 1,402.31 pts.
La información económica, tanto de Europa como de EU, fue
decepcionante. En Europa, desilusionó el comportamiento de la manufactura en
abril, medido por el PMI: se redujo no sólo en los países periféricos coma
España, Italia o Grecia, economías que están en recesión, sino también en el centro
del continente, en las sólidas economías de Francia y Alemania. Así, en Alemania
la lectura fue la más baja en 33 meses, lo que señala que tampoco la economía
teutona está libre de riesgos.
A su vez, la tasa de desempleo de la eurozona se elevó a un
nuevo récord desde el lanzamiento del euro, a una tasa de 10.9%. Ambos asuntos golpearon a las bolsas de la
región, sobre todo a la periferia, donde el Ibex-35 de Madrid llegó a caer a
niveles de 2003 arrastrado por el derrumbe de la banca, si bien terminó al
final por encima de los 6,800 pts, en los 6,831.90 pts al hundirse un 2.55%. La
bolsa de Milán se despeñó un 2.6%. El Dax de Francfort se dejó un 0.75%
mientras que el Cac-40 de París fue el único índice que salvó el pescuezo
(+0.45%).
En EU, las noticias económicas antes de la apertura no fueron
buenas. El pronóstico para la nómina privada de abril de ADP se ubicó en 119,000,
muy por debajo de la estimación del consenso (170,000) y de la cifra registrada
en marzo (201,000). Eso hizo presagiar que el dato de empleo de abril que se
publica el viernes pueda ser menor de lo que dicen los analistas: el consenso
de Bloomberg prevé una lectura de 160,000, en tanto en Dinero Llama Dineroestimamos que se ubique un poco por abajo del consenso, en 140,000.
Esa información hizo que la apertura en Wall Street fuera a
la baja. Pero poco a poco los mercados se fueron recuperando impulsados por las
tecnológicas del Nasdaq. A los inversionistas les gustaron los reportes de
empresas como la empresa de ingeniería y manufactura para productos electrónicos
Flextronix International (+5.0%), o la empresa de aplicaciones para el GPS Garmin
(3.9%).
Frente al avance de las tecnológicas, los otros dos índices
retrocedieron arrastrados sobre todo por las financieras, por los problemas de
la banca europea, y las energéticas y compañías de materiales básicos por la
señales de enfriamiento de la economía global y luego del descalabro de
Chesapeake.
En las financieras, y dentro del Dow Jones, se hundieron
Bank of America (-1.8%) y JP Morgan (-10.4%). Por otro lado, entre las empresas
de materias primas y energía, Alcoa se derrumbó un 2.4%, Chevron un 1.2% y
Exxon Mobil un 1.0%.
Un caso especial fue el de Chesapeake, que se desplomó casi
un 15% luego de reportar unos resultados
trimestrales peores a lo pronosticado al cierre de ayer. Además, su director
ejecutivo Aubrey McClendon está siendo investigado por haber utilizado sus participaciones
en los pozos de la compañía para obtener créditos. Chesapeake fue hoy la peor
acción del S&P’s 500.
La mejor, en el polo opuesto, estuvo TripAdvisor, con un
rally del 16.7% luego de reportar unas utilidades e ingresos mejores a lo
esperado.
Otro sector que subió hoy fue el de las constructoras, luego
de que Beazer Homes se mostrara optimista respecto al futuro, lo que hace
pensar que por fin el sector está saliendo del hoyo. D.R. Horton avanzó un 3.4%
y Lennar un 2.7% y Pulte Group un 2.4%.
Para mañana, la atención estará puesta en buena medida en la
reunión del Banco Central Europeo (BCE). La situación tanto financiera como
económica de Europa se ha deteriorado, y el BCE debería hacer algo para evitar
el colapso de la región. Sin embargo, el consenso de analistas no prevé que el
BCE mueva las tasas de referencia, actualmente en 1%.
Pero no sólo está ese instrumento de política monetaria.
Cuando menos, el BCE debería indicar que está dispuesto a reanudar su programa
de compra de activos, con el cual ha comprado bonos de deuda soberana de los
países en apuros con el fin de mantener las tasas en niveles sostenibles. Así lo
insinuó uno de sus altos funcionarios hace poco y el mercado reaccionó de
manera favorable. ¿Por qué no tomar ese camino para ayudar a los países de la
periferia?.
En cuanto a los indicadores económicos de EU, la atención
estará centrada en los reportes relacionados con el mercado laboral en vísperas
del reporte de empleo. Se publican las solicitudes de subsidios de desempleo para
la semana terminada el 28 de abril, que se estima retrocedan a 375,000 tras
ubicarse en 388,000 la semana previa.
También tendremos el reporte de Challenger sobre los
despidos planeados por los empresarios, y el ISM no manufacturero para abril.
El índice general, según el consenso, podría ubicarse en 55.5 comparado con
56.0 en abril. En este caso será importante ver el comportamiento del
componente de empleo.
Finalmente, se publicarán los informes preliminares de
productividad y costos laborales unitarios para el primer trimestre.
En los reportes corporativos, nos esperan los resultados de
empresas como la aseguradora AIG, rescatada mil veces por el gobierno, así como
de General Motors o Kraft Foods.
No hay comentarios:
Publicar un comentario