lunes, 27 de agosto de 2012

Cierre de Wall Street: Sin apenas cambios en otra jornada de verano y transición


Asia cerró mixto, con la bolsa china castigada por nuevas evidencias de que el sector industrial, su principal bastión exportador, está débil; Europa cerró con ganancias ante la percepción de que el plan orquestado por el BCE y los líderes europeos saldrá adelante en septiembre, por lo que la bolsa que más trepó fue de nuevo la de Madrid; y Wall Street cerrón sin apenas cambios, a la espera de los acontecimientos de Europa y del discurso que el presidente de la Fed, Ben Bernanke, dará el viernes en el simposio de Jackson Hole. 


Al cierre de la jornada, el Dow Jones perdía un 0.25% para concluir en los 13,124.67 pts mientras que el Nasdaq, alentado por Apple, se apreciaba un 0.11% para terminar en los 3,073.19 pts. Finalmente, el S&P’s 500, el índice que mejor sirve para evaluar el tono general del mercado, retrocedía un 0.05% para acabar en los 1,410.44 pts.  

La sesión fue de nuevo de muy bajo volumen, y así será a lo largo de toda la semana, la última del verano antes del feriado del “Día del Trabajo” del próximo lunes 3 de septiembre (el viernes el mercado de bonos cerrará temprano y los inversionistas saldrán a aprovechar los últimos días de playa). La ausencia de información económica en EU contribuyó a la apatía general.

Los reflectores los acaparó de nuevo Apple, que subió un 1.8% luego de que una corte estadounidense le diera la razón y multara a la surcoreana Samsung con más de 1,000 millones de dólares por infringir los derechos de patente de Apple. El litigio seguirá: Google, que vende su sistema operativo Android a Samsung, también se verá afectada y recurrió a un tribulan de apelación, en tanto que Apple pide que los teléfonos y tabletas Galaxy, los dispositivos de Samsung que compiten iPhone y al iPad de Apple, no se puedan comercializar en EU.

De modo, que frente a la subida de Apple, Samsung se derrumbó en la bolsa de Seúl un 7.5%. Google, la otra afectada, retrocedía un 1.5%, en tanto que otros competidores de Samsung, que pueden aprovechar el golpe que le han dado para quitarle cuota de mercado, subieron con virulencia. Tal fue el caso de la olvidada Nokia, que ganó un 5.5%.

Entre tanto, el mercado esperará pacientemente al discurso de Ben Bernanke del viernes. Tendrá un papel difícil en Jackson Hole: las minutas de la Fed señalaron que a menos que la economía de EU muestre señales de repuntar de manera “sustancial y sostenida”, están listos para aplicar nuevos estímulos monetarios.  El viernes pasado, Bernanke todavía dijo que la Fed todavía tiene margen para hacer más cosas y ayudar a la economía en caso de ser necesario. Lo malo es que tras los indicadores económicos de julio (dato de empleo, ventas minoristas, producción industrial, permisos de construcción, precio de casas, confianza del consumidor), esa necesidad se ha visto menguada.

El texto de las minutas, a estas alturas, se ve obsoleto. Así, con esos datos, la animadversión en el seno de la Fed hacia nuevas medidas de estímulo monetario ha podido crecer. Además, el discurso de Bernanke se celebrará en plena campaña presidencial y una semana antes de conocerse otro indicador clave, la nómina no agrícola para agosto. El mercado espera un mensaje contundente de Bernanke a favor de más estímulos, pero será difícil que el presidente de la Fed cumpla con esas expectativas.

En Europa,  el beneplácito del Bundesbank al plan de Draghi parece implícito tras las declaraciones de Jörg Asmussen, quien en un acto organizado por el Bundesbank, reconoció que ya se está trabajando “en los detalles técnicos y operativos del programa” de compra de deuda y que será el principal asunto de la reunión del BCE del 6 de septiembre. Aun así, y por lo filtrado al final de la semana pasada, el BCE podría no hacer un anuncio formal hasta al menos el 12 de septiembre, cuando se conozca el veredicto de la corte alemana sobre la constitucionalidad o no del fondo permanente. Sí, el presidente del Bundesbank, Jens Weidmann, se sigue oponiendo, pero en el gobierno de Merkel lo empiezan a ver cono un incordio.

Por otro lado, también caló el mensaje de los principales líderes europeos de que Grecia seguirá en el euro si su gobierno cumple con lo prometido, además de que Angela Merkel llamó al orden exigiendo que se deje de hablar alegremente sobre la posibilidad de una salida de Grecia. Ahora bien, ahí la última palabra la tiene la Troika: ningún gobernante quieren que lo señalen como el que expulsó a Grecia.

El caso es que en Europa prevalecieron las subidas, lideradas por España. Francfort trepó un 1.1% pese al deterioro de la confianza de los empresarios, y Milán un 0.9%. Sin embargo, la prima de riesgo se mantuvo sin grandes cambios, con la de España rondando los 500 pbs y la italiana en torno a los 435 pbs.

Entre los sectores el más castigado fue del de materiales básicos (-1.0%), seguido del de telecomunicaciones (-0.5%) y el industrial (-0.3%). El de mejor desempeño fue el de servicios domésticos (0.2%) y el de tecnología (0.2%).

 Dentro del Dow Jones, Hewlett-Packard sigue siendo castigada sin miramientos: hoy cayó un 2.1% (su rival Dell se dejó un 1.2%). También, y dentro del sector de materiales básicos, salió muy mal parada el fabricante de aluminio Alcoa (-1.7%), que ve como el precio del metal cae a un mínimo de 3 años. Entre las industriales, Caterpillar se dejó un 1.0%, y entre los bancos, Bank of America retrocedió un 1.1%. La acción que más subió en el Dow Jones fue Cisco Systems, que desde que anunció un incremento del 75% en su dividendo, no ha hecho más que trepar.

Para mañana, tendremos dos datos económicos en EU: uno es el precio de las casas, que en caso de corroborar que se están recuperando podría dar un impulso a las constructoras de casas, cuyas acciones que han volado en lo que llevamos de año, y la confianza del consumidor del Conference Board.  

Para los precios de las casas, medido por el S&P’s/Case Shiller, se prevé que el precio de la vivienda sea en junio un 0.3% inferior al registrado hace un año, comparado con -0.7% en mayo. Para la confianza del consumidor de agosto se prevé una lectura de 65.7, casi sin cambios respecto a julio (65.9). Pero por la pinta, también tendremos una jornada tranquila, sin grandes alteraciones. 

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